Sequía y piscinas: mito o realidad

Sequía y piscinas: mito o realidad. 

Titulares como este, o similares, en los que se criminaliza el uso de agua en piscinas se están haciendo cada vez más habituales.

En Francia, incluso, se ha llegado a prohibir la venta de piscinas desmontables con el objetivo de combatir la falta de agua.

Dentro de una campaña organizada, se intenta buscar un “chivo expiatorio” al problema de la falta de agua que se sufre buena parte de Europa. La situación de sequia excepcional en España ha promovido alertas que conviene analizar con datos objetivos.

Mas allá de la responsabilidad de todos en hacer un uso más responsable del agua, y el compromiso estratégico de PoolComet en promover sistemas de ahorro energético y ciclo sostenible del agua en piscina, hemos analizado datos reales tomando el caso de España preguntándonos: ¿Cuánta agua se utiliza en el llenado de piscinas en España? ¿Es cierto que “las piscinas de los ricos dan sed a las ciudades” como dice el titular sensacionalista? 

Capacidad total de agua embalsada.

Según datos del Ministerio para la transición ecológica y de AEMET en abril de 2023, España cuenta con una capacidad total de agua embalsada es de 56.000 hectómetros cúbicos.  

La media de agua embalsada de los últimos 10 años es, según AEMET, de un 66,77% o 37.438 hectómetros cúbicos. 

¿Cuánta agua almacenan las piscinas?

Si tenemos en cuenta el número total de piscinas en España, y estimamos el tamaño promedio de la piscina doméstica en 8×4 metros, y de las piscinas publicas en 20×10 metros, nos dará un total aproximado de 75 hectómetros cúbicos de agua en piscina.  

Es decir, el total de agua almacenada en piscinas en España es sólo un 0,12% del total, sin tener en cuenta el caudal de los ríos, acuíferos, pozos y otro tipo de fuentes de agua. 

¿Cómo aprovechamos el agua embalsada?

Uno de los mayores retos de la gestión sostenible del agua, especialmente en un país como España, donde existe riesgo creciente de desertificación, es el control de la perdida de agua en la red de abastecimiento.  

El nivel de pérdidas en el abastecimiento de agua se define como la diferencia entre la cantidad de agua abstraída, y la cantidad de agua consumida por los usuarios finales. Estas pérdidas se refieren al consumo de agua y pueden ocurrir en cualquier etapa del proceso de abastecimiento. 

Existen dos tipos de pérdidas: reales y aparentes. Las pérdidas reales son aquellas que se pueden medir y se deben a averías, roturas y fugas. Y por otro, las pérdidas aparentes están asociadas con errores de medición, fraudes y consumos autorizados no medidos. 

Según un estudio de la consultora PWC, realizado en 2018, “El nivel de pérdidas en España es muy alto con respecto a países comparables, y suponen el equivalente al 25% del consumo, esto incluye tanto perdidas reales (c.15%) como perdidas aparentes (c.10%)”. 

Según este dato, una cuarta parte del total del agua embalsada se pierde durante el proceso de conducción, saneamiento y potabilización.  

Eso supone que las pérdidas de agua representan 200 veces el volumen total de agua de las piscinas en España.  

¿Qué uso damos al agua?

Según un informe del Instituto Nacional de Estadística, el 75% del agua en España se dedica a regadío de agricultura, un 10% a industria y un 15% restante a hogares y servicios.

Una revisión en profundidad de la eficacia de los sistemas de regadío actual, que consume tres cuartas partes del total, sería una medida muy adecuada para garantizar un mejor nivel de capacidad general de agua para consumo. 

¿Qué puedo hacer para ahorrar agua en mi piscina?

Conservar bien el agua debería ser una prioridad para todos los propietarios de piscina.  Con unos simples consejos puedes mejorar el ahorro de agua y tu factura mensual. 

• Cubre la piscina: Si no la estás usando, es recomendable que cubras la piscina para evitar la evaporación del agua. Esto ayudará a conservar el agua en la piscina y a reducir la necesidad de agregar agua nueva. 
• Mantén la piscina limpia: Al mantener la piscina limpia, se reduce la necesidad de hacer lavados y enjuagues de agua. Limpia regularmente las hojas y otros residuos que puedan caer en la piscina, y utiliza productos químicos adecuados para mantener el agua en buen estado.
• Utilizar un robot limpiafondos eléctrico en tu piscina es una excelente forma de ahorrar agua y mantenerla limpia de forma sencilla. Al mismo tiempo que limpia el fondo y las paredes, el robot limpiafondos filtra el agua, haciendo menos frecuente la necesidad de lavados y enjuagues del filtro.
  
• Utiliza sistemas de filtración eficientes: instalar sistemas ciclónicos antes del filtro de arena, cambiar la arena por vidrio filtrante, o utilizar sistemas con filtros de cartucho, son excelentes formas de reducir los contralavados de filtro, ahorrando un 75% de agua en cada contralavado. 
• Presta atención al balance químico del agua de tu piscina. Manteniendo correctamente los niveles de pH, cloro, alcalinidad y estabilizante, prevendrás desequilibrios en el agua. La mayoría de esos desequilibrios te obligarán a vaciar y rellenar el agua de la piscina en algún momento.

 Conclusión 

El agua total de piscinas en España representa menos del 0,12% del total de agua embalsada en España, mientras que las fugas, perdidas y malos usos no permitidos, suponen más de un 25%.

La agricultura, que acapara un 75% del total de consumo nacional, es la actividad que más recursos hídricos consume.

No son “las piscinas de los ricos las que dan sed a las ciudades”, sino una política de gestión, distribución, potabilización y control de pérdidas menos eficaces que las de paises de nuestro entorno. 

A nuestro nivel, profesionales y propietarios podemos mantener nuestras piscinas de forma sostenible. Cuidar el agua es responsabilidad de todos, y pequeños gestos nos ayudan a hacerlo.